Momentos de estancamiento, momentos de oportunidades
06 Jun 2015
Lo primero que se suele hacer al momento de buscar respuestas a una situación de estancamiento es analizar los números al derecho y al reverso. En muchos casos las respuestas pueden encontrarse allí. Pero cualquier persona a cargo de un grupo humano o encargada de liderar cualquier área de una compañía sabe que no siempre todo se reduce a un análisis pormenorizado de los números.
Es más, son muchas las ocasiones en las que el estancamiento se produce en medio de empresas prósperas que, sin embargo, ven cómo sus recursos humanos se desmotivan y desunen, mientras que sus proyectos pierden impulso y creatividad.
Esas instancias en las que una compañía se estanca, ya sea desde el punto de vista financiero, humano, creativo o u organizativo, son momentos en los que surgen grandes oportunidades de avanzar.
La importancia de hacerse las preguntas correctas
Las preguntas más fundamentales son las que menos nos hacemos. En medio de preocupaciones mundanas, muchas veces olvidamos la verdadera razón por la que vivimos y trabajamos. Lo mismo le ocurre a las empresas. Con el tiempo todo parece perder sentido, los objetivos se desdibujan y las cosas parecen hacerse porque sí.
En oportunidades como esas, un proceso de coaching puede ser un gran aliado para ayudar a que cada uno de los miembros de un área o empresa se haga las preguntas indicadas. A partir del cuestionamiento de nosotros mismos podemos encontrar los primeros pasos de un nuevo camino por el que transitar con motivación y espíritu de superación.
El rol del coach
El coach ayuda a que esas preguntas sean ponderadas, priorizadas y puestas en perspectiva. Una vez que surgen las preguntas atinadas, se trata de canalizar esas interrogantes y de armar planes de acción en función de ellas. Esos planes de acción son los que permiten entroncar nuestros caminos en función de objetivos claros, concretos y viables.
